frases largas de abogados colección 01
frases largas de abogados
Existen dos clases de abogados: Los buenos: los que conocen muy bien las Leyes, y los Mejores: los que conocen muy bien al Juez.
frases largas de abogados
Abogado: recuerda siempre que tú eres para el cliente y no el cliente para ti. No intentes nunca en los tribunales ser más que los jueces, pero no consientas ser menos.
"Piensa": El derecho se aprende estudiando, pero se ejerce pensando. Ten fe en el derecho como el mejor instrumento para la convivencia humana, en la justicia como destino normal del derecho, en la paz como sustitutivo bondadoso de la justicia, y sobre todo ten fe, sin la cual no hay derecho, ni justicia ni paz. "Olvida": La abogacía es una lucha de pasiones. Si en cada batalla fueses cargando tu alma de rencor, llegara un día en que la vida será imposible para ti. Concluido el combate, olvida tan pronto tu victoria como tu derrota.
Los Abogados son como las putas; hay que pagarles por adelantado y después hay que estar rogándoles para que se muevan.
Después de todo lo leido no me quedan ganas de seguir estudiando... pero continuaré para lograr mi objetivo: ser un ladrón con título.
Los abogados sabemos tratar a la gente y sabemos luchar por la persona a la que defendemos, cualquiera que haga lo contrario no es abogado.
Al que ayuda a un criminal a cometer un delito se le llama cómplice; si le ayuda después de cometerlo se le llama abogado.
Los abogados somos como el cura de un pueblo, sólo acuden a nosotros por necesidad o para quitarse de encima un marron que les "pesa" en la conciencia. Asé que no se quejen tanto.
El abogado que quiera cobrar nunca defenderá a las tres P: Putas, Pobres y Parientes.
Nunca pelees con abogados: hablan mucho, concretan poco y lo peor de todo es que nunca les podrás ganar.
El derecho es un arma, la abogacía, el esgrima y los abogados somos los saqueadores.
Abogados, son los que le dan una nota de color a la monótona economía, pero, aún así, ¿qué sería de nosotros sin ellos?
He sido 20 años abogado en ejercicio. Son unos ladrones, fantasmas, gente sin escrupulos, que se ganan la vida con las desgracias ajenas y ademas te engañan. Pero tienes que recurrir a ellos. Así está montada está sociedad.
Para ver a un abogado el cliente se viste con su peor ropa y sus primeras palabras en vez de saludo son "Lic. no tengo ni un centavo".
Si las rejas de la carcel las pusieran directamente en la facultad de derecho, nos ahorrariamos muchos disgustos y ESO SI SERIA HACER JUSTICIA.
El Abogado es como una prostituta, primero le pagas antes que te dé su servico, y luego tienes que rogarles para que se muevan.
Que mal catalogados nos tienen, ¿que harian sin nosotros?, nos pasamos la vida luchando por la justicia, ¿es eso un delito?... Sólo deben confiar.
Vendo ataud para abogado: tiene agujeros en el fondo para que los gusanos salgan a vomitar.
Primero los cavernícolas y la precariedad, después los tiranos y el sometimiento, luego los abogados y el orden social... cuidado, vienen los ingenieros comerciales... Vayan buscándose una cueva!
El Abogado ha de ser como la hoja de una espada... recto, flexible, brillante y acerado!. ¡Gracias a Dios, soy Abogado!.
Dime la incompetencia de un abogado, la estupidez del criminal y te dire los años de pena que le caen.
Los abogados somos esos liantes, cabroncetes, bichejos, ladroncetes, tiburones, careros que... te sacan del lio en que ese cabroncete con ojos de bichejo y asociado a un grupo de ladroncetes con cara de tiburones y que trabajan más caro que nadie te ha metido por no leerte la letra pequeña de ese papelillo llamado CONTRATO que firmaste sin consultarlo con el bichejo de tu ABOGADO por que, "[...] hombre, ¡tan poco te fías de mi que quieres que tu abogado le eche un vistazo! [...]"
Sin abogados, no hay leyes; sin leyes, no hay Derecho; sin Derecho no hay Justicia; sin Justicia, no hay nada.
Los abogados nos olvidamos de abogar por los problemas encomendados y pasamos a abobar para estar bien con los Jueces.
Los abogados son como las tormentas, impredecibles en cuanto a resultados pero necesarios para nuestra naturaleza.
El abogado es un profesional del derecho que no cree en la justicia, sólo en la lucha para conseguirla, y no siempre lo consigue.
Cuando el abogado gana, es muy bueno, pero cuando pierde un caso, es lo peor; pero cómo serán los que no lo son cuando necesitan de la ayuda de alguno.
Un abogado es lo suficientemente inteligente como para estudiar turismo, lo suficientemente hábil como para estudiar contaduría, lo suficientemente talentoso como para estudiar ingeniería y lo suficientemente constructivo como para estudiar arquitectura...
Los únicos abogados que realmente existen somos nosotros mismos. Nosotros somos los únicos abogados de nuestras propias vidas...
¿Para qué tanto estudiar si luego no quieren trabajar bien? Desperdicio de tiempo. Ya se les olvidó lo que aprendieron en la facultad...
Conseguir un buen abogado no es tarea fácil... Esfuérzate cada día en la universidad y lo tendrás las 24 horas...
Un abogado es la persona que cuando dos se están peleando por una vaca, y jalándola una de la cola y el otro de los cuernos, los anima mientras él la ordeña.
Si quieres conocer que clase de abogado tienes, lleva un gato a su estudio, si corre ese abogado es un perro, y si entra, ese abogado es una rata.
El abogado penalista es el único que tiene las llaves para abrir cada una de las puertas que se encuentran a manera de obstaculos y antesalas amargas durante todas las fases del proceso criminal en búsqueda de una sentencia absolutoria, sea cual fuere el delito que le imputen a su defendido.
Ya quisieran muchos saber como resolver los problemas como lo hacen los abogados, porque para ello se necesita conocer la naturaleza del hombre.
El mejor abogado no es aquel que siempre se pasa leyendo libros, tomando cursos y estudiando más... sino aquel que sin leer tantos libros, tomar tantos cursos, ni seguir estudiando más aplica todos sus conocimientos obtenidos día a día en el mejor campo de enseñanza y aprendizaje, la practica diaria de su profesión.
El abogado aprende el 20% de su profesión en las aulas de la universidad y el 80% restante en la practica diaria de los conocimientos obtenidos.
El abogado no vale por lo que sabe sino por el ingenio y la capacidad de utilizar todos los conocimientos a su favor.
El abogado nunca cobra lo suficiente si tienes en cuenta lo que deberías pagar si ellos no estuvieran salvandote el pellejo cada vez que te metes en problemas.
Mientras la persona común sólo mira a los ojos y escucha las palabras, el abogado observa y averigua los pensamientos.
La Justicia es invisible a los ojos gracias a que tu abogado se encarga de que la conserves y no debas preocuparte por ella.
Los abogados son meros interpretes del derecho que se ganan la vida tan humildemente como cualquier otra persona.
Mientras los ojos del juez estén vendados no tienes de que preocuparte, preocúpate cuando estén vendidos.
EmoticonEmoticon